Ya está, después de varios intentos, lo he conseguido: ¡LA receta perfecta de shortbread sin gluten y sin lácteos! ¡Úsala en tu dieta cándida cuando quieras darte un capricho con una tarta!
Por otro lado, una vez rellena, la tarta de frutas contiene bastante azúcar… así que no hay que abusar de esta receta, ¡sobre todo al principio de una dieta!
Pero está tan bueno que estaba desesperada por encontrar una solución para aligerar la carga de la forma más sana posible.
Así que ahí lo tienen, la receta está validada, esta masa quebrada cumplió con todos los criterios que me había fijado:
- sin gluten y sin productos lácteos
- fácil de hacer: no se rompe, fácil de untar, pero sin demasiados ingredientes
- y, por supuesto, ¡muy sabroso!
- sin azúcar (sacarosa)
Shortbread sin gluten, sin lácteos Y SIN AZÚCAR ???
Sí, como la masa quebrada es calórica, y como le vamos a añadir fruta cocida, lo que significa mucho azúcar, vamos a elegir una opción interesante, una especie de comodín: el azúcar de abedul, cuyo bárbaro nombre químico es Xilitol.
No olvides la báscula.
Dicho esto, ¡ha llegado el momento de la receta! Recuerda que la cocina sin gluten y sin lácteos es exigente. Para hacer esta masa quebrada, las cantidades (de harina en particular) deben ser precisas para conseguir la consistencia adecuada.
Así que, si aún no lo has hecho, invierte en una balanza de precisión: ¡no te arrepentirás!
Tiempo de preparación: 20′ / Tiempo de cocción: 20′.
Ingredientes – 26 cm de masa quebrada sin gluten y sin lácteos
- 70 g de margarina sin leche (retirar 10′ antes para que se ablande)
- 80 g de harina de arroz
- 40 g de almendra en polvo
- 40 g de harina de teff
- 30 g de azúcar de abedul (xilitol)
- 1 huevo
- 1/2 cucharadita de goma guar
- Añade la fruta que prefieras: manzanas, peras, ciruelas, albaricoques y frutos rojos primero si tienes candidiasis.
Si sufres de candidiasis, tal vez pueda ayudarte, haz clic aquí si quieres saber más.
Preparación – masa de galletas sin gluten ni lácteos
- Saca los 70 g de margarina de la nevera 10′ antes de la preparación para que se ablande.
- Hacer una pequeña compota con 1/4 de la fruta y cortar el resto de la fruta en cuartos pequeños.
- Mezclar las harinas, la almendra en polvo y la goma.
- Añadala margarina troceada y mézclela con las harinas, utilizando las manos, hasta obtener una mezcla que se parezca un poco a un crumble. Ten cuidado, ¡se te pegará a las manos!
- Batir el huevo en un bol aparte, añadirlo a la mezcla con el azúcar de abedul y remover con una cuchara de madera.
- Formar una bola con la masa, añadiendo un poco de harina si es necesario.
- Coloque la masa sobre papel de horno (a ser posible sin blanquear), enharínelo ligeramente y extiéndala con un rodillo o, en su defecto, con un vaso de mostaza.
- Cubrir con la compota y, a continuación, con la fruta cortada en cuartos.
- Hornear durante unos 20′ a 180°C (vigilar).